martes, 16 de diciembre de 2008

"Se preocupó más por su auto que por las posibles víctimas"

"Se preocupó más por su auto que por las posibles víctimas"


El camarista Delio Vera Navarro había admitido a la dueña de casa estar borracho, tras el accidente. El comandante Viviano Machado y su esposa pretendieron tapar el hecho para que no se haga público.


Por Freddy Aguilera
faguilera@uhora.com.py

Nilda Gregoria Meza, dueña de la casa en cuyo patio fue a parar el camarista y miembro del Tribunal de Apelaciones en lo Criminal Delio Vera Navarro, con su rodado Mercedes-Benz, la noche del domingo, presuntamente bajo los efectos del alcohol, dijo que el mencionado magistrado se preocupó más del estado en que quedó
Meza aseguró que Vera Navarro había admitido que estaba muy pasado de copas y que se encargaría de todos los daños que había ocasionado.
"Qué pucha, no pasó nada" fue lo primero que habría dicho el magistrado cuando irrumpió a gran velocidad la propiedad de los Cubilla con su vehículo, tras atropellar la muralla de protección.
Pero lo que más lastimó a la familia Cubilla Meza es la actitud de su vecina la jueza Edith González, esposa del comandante de la Policía Nacional, comisario Viviano Machado, quien quiso utilizar sus influencias como magistrada de la Niñez y la Adolescencia para retirar a como dé lugar el rodado de su colega.
PERIODISTAS NO. Como si esto fuera poco, obligó a la dueña de casa a que despida a los periodistas que fueron a realizar la cobertura para que el hecho se solucione entre ellos y no se haga público. La misma jueza se habría encargado de llevar al camarista hasta su domicilio primero para luego trasladarle hasta un sanatorio privado.
COMANDANTE PREPOTENTE. Según algunos vecinos del lugar, el comandante Machado también recurrió a sus influencias para que el hecho no se hiciera público y en algún momento actuó de manera prepotente, increpó hasta a la propia dueña de casa porque esta impidió que se saque el vehículo Mercedes-Benz del magistrado antes de la presencia de la fiscala de turno Gladys González.
NO SE HIZO EL ALCOTEST. El subjefe de la Comisaría 4ª Central, comisario Osvaldo Ayala, quien realizó el procedimiento, admitió que al magistrado no se le realizó el alcotest, justificando que la única razón es que este tiene fueros.
COIMA. La familia afectada sostiene que el oficial interviniente del móvil P 55 del Sistema 911, Roque González, aceptó 200 mil guaraníes de parte de Vera Navarro, pero que luego los devolvió cuando fue encarado por los afectados. Ayala admitió que el magistrado lanzó a los presentes algunos billetes, pero luego les fueron devueltos. Los bomberos de Lambaré también fueron blanco de coima, pero inmediatamente la rechazaron.
ACUERDO. La familia llegó a un acuerdo económico con los representantes legales del autor del percance en cuanto a la reposición de los daños y perjuicios que causó el accidente. Sin embargo la fiscala Gladys González dijo que de igual manera continúa la investigación sobre el supuesto hecho de exposición al peligro en el tránsito terrestre.
INVESTIGACIÓN. La Oficina de Ética Judicial inició trámites preliminares para investigar la situación en que estaría envuelto el camarista. El organismo que juzga éticamente a los magistrados ofició a los medios de comunicación a fin de que faciliten grabaciones, fotografías y todo material que pueda servir para la investigación. Una vez que se tengan los elementos primarios es probable que se dé el derecho a la defensa al camarista a los efectos de ser oído.

Fuente: UltimaHora Digital 16/12/2008

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